Pensar en Praga es pensar en una ciudad de cuento, una ciudad donde enamorarse, donde perderse no supone un problema (más bien una ventaja) y donde cada detalle parece elegido para conquistarte…

Pensar en Praga es pensar en una ciudad de cuento, una ciudad donde enamorarse, donde perderse no supone un problema (más bien una ventaja) y donde cada detalle parece elegido para conquistarte…
Si Praga fuese una persona, sería mujer. Sin duda alguna. Con tan sólo un par de horas os daréis cuenta del romanticismo y delicadeza que la envuelven, de la sensualidad con la…